Por Antea Izquierdo y Oscar DB.
El pasado 28 de diciembre, como
abriendo el Día de los inocentes, fueron detenidos/as Oriol Ciurana
y Marta Llorens, concejal y concejala de las CUP de Reus, acusados de
un delito de “odio a la policía”, por criticar las actuaciones
policiales el 1 de octubre ante los colegios electorales.
Estas nuevas detenciones se enmarcan
dentro de la ola represiva que vive Catalunya y que ya se ha llevado
por delante su Autonomía (con la aplicación del art.155), el
encarcelamiento o exilio del gobierno catalán en su totalidad, el
encausamiento de cientos de alcaldes, alcaldesas y profesores/as...
más de 900 personas heridas tras las cargas policiales del 21 de
diciembre, además de haber cimentado el odio a lo catalán entre la
población del resto del estado español.
Casi 10 millones en salarios extra de
16,000 policías nacionales y guardias civiles después, detenciones,
palizas televisadas, robo de urnas, cientos de portadas incendiarias
en la prensa amiga y miles de páginas de catalanofobia volcadas
sobre nuestros ojos, tras elevar las agresiones impunes de grupos
fascistas, tras disolver el gobierno catalán y convocar unas
elecciones hechas a su medida, tras todo eso, el pueblo catalán ha
demostrado tozudamente que una mayoría (aun mas amplia que el 1 de
octubre) quieren ser independientes o como mínimo decidir en
libertad su relación con el Estado español. Esas son las cifras
oficiales. Aun con los candidatos/as indepes en la cárcel o en el
exilio, el bloque del 155 ha sido incapaz de imponer su locura y su
odio.
¿Y ahora? Ni a palos ni con cárceles
y tribunales el PP (hundido en la miseria por su versión ultra, C´s)
y un PSOE lacayo del IBEX han dado ese vuelco que pretendían a su
favor. La España Una, Grande y Libre ha encontrado en Catalunya su
eslabón mas débil, aquel por donde es posible quebrar el Régimen
del 78, ese esclavo de los poderosos que el bipartidismo se obstina
en defender.
Oriol y Marta son los penúltimos en
sufrir el intento de escarnio que los que mandan quieren mostrar en
Catalunya; su lucha y la dignidad mostrada en el desempeño de su
cargo público elevan el nivel del debate en un momento en el que en
el resto del estado español se extiende la ola represiva y se
condena a lxs vecinos de un barrio por oponerse a las obras
faraónicas de un alcalde lacayo del cacique local, se manda a la
cárcel a la gente por un retuit o una canción mientras los
poderosos, políticos y los “M.Rajoy” no solo no pagan por sus
crímenes y robos, sino que nos gobiernan y veranean en nuestras
costas mientras las y los trabajadores con sueldos de hambre les
servimos las copas y les limpiamos las habitaciones de sus hoteles.
Catalunya es el laboratorio: los
partidos de lo que antes se llamaba “casta” y ahora algunos
llaman “socios de gobierno” están probando hasta dónde son
capaces de llegar y cuál es el nivel de resistencia de una izquierda
que, debiendo enfrentárseles con luchas, huelgas y solidaridad ,no
está estando a la altura, llegando incluso a la desfachatez de
aprobar la aplicación del 155, declarando como “lógico” que se
encarcele a políticos y un sinfín de inmundicias mas. ¿Dónde
quedaron los programas políticos en los que defendían algunos el
Derecho de Autodeterminación?
Algo tiene que cambiar. Desde todo el
estado español son muchas las voces que defendemos el derecho del
pueblo catalán a decidir su futuro en libertad y sin que les abran
la cabeza a porrazos. Nuestras voces, elevadas, pretenden llegar a
cada extremo de la piel de toro, para que todas las Martas y todos
los Oriol sepan que siempre nos tendrán “al seu costat” en
Burgos, en Bilbao o en Madrid. Los pasados días 16 y 17 nos reunimos
en Barcelona cientos de activistas, cargos públicos, sindicalistas
de todo el mundo... en
una imponente muestra de solidaridad . Ése, y
no otro, es el camino correcto. En Burgos estamos trabajando varias
organizaciones y personas por construir una herramienta unitaria de
solidaridad con Catalunya. Creemos que la solidaridad activista y la
pedagogía en cada barrio, aula, centro de trabajo o ciudad de todo
el estado español conseguirá arrancar una victoria que, no nos
equivoquemos, al debilitar al bipartidismo del IBEX 35 y el
capitalismo español, será una victoria de toda la clase
trabajadora. Pongamos manos a la obra.
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